Por Francisco Miró Quesada Rada. Director
En nuestra Carta al Lector del 19 de octubre expresamos nuestra posición como diario independiente de los grupos de poder políticos y económicos. Este es un principio fundamental. Por eso rechazamos las insinuaciones que ciertas personas vienen haciendo al llamarnos gobiernistas. Nada más lejano de la verdad. Así como exigimos total transparencia en los actos de las autoridades, consideramos que las informaciones que se publican deben ser plenamente comprobadas. Eso lo saben muy bien nuestros lectores. De igual forma actuamos respecto a las políticas gubernamentales como respecto a la oposición.
Asimismo nos oponemos a la actuación de lobbies que pretenden copar los medios para imponer sus intereses, sean económicos o políticos. Las relaciones entre la prensa y el poder político no están solo referidas al poder que desde el Estado ejerce el gobierno, sino también al poder de los grupos de interés. El Comercio no tiene ningún vínculo con poderes económicos, como algunos han manifestado. El único poder que respetamos es el que proviene del escrutinio diario de nuestros lectores y del pueblo, en los procesos electorales como en el marco de la coyuntura política. Si bien los medios de comunicación cumplen un rol esencial en la democracia, deben igualmente contribuir con su desarrollo y consolidación.
Con respecto a nuestra posición sobre la corrupción y la interceptación telefónica, reiteramos que ambos son delitos. Nos llama la atención la posición de aquellos que los contraponen. ¿Por qué esconder y desinformar sobre la interceptación telefónica? ¿Qué juego tienen entre bambalinas? ¿Qué 'sorpresa' tienen bajo la manga? ¿A quiénes chantajean? En esto tenemos que ser totalmente transparentes. No se puede relativizar al respecto, haciendo creer que solo debe denunciarse al delincuente 'chuponeado' y no al 'chuponeador'. "En el ejercicio de la profesión de periodista, el fin no justifica los medios, la información debe ser obtenida por medios legales y morales", dice la Resolución 103 del Consejo de Europa, respecto a la ética periodística, excelente planteamiento que deberían tenerlo en cuenta algunos periodistas y medios de comunicación.
El derecho de las personas a la vida privada debe ser respetado. El peor enemigo de la democracia no es solo la sumisión al poder, sino el temor de no poder expresarse libremente, porque el ciudadano siente que puede ser interceptado telefónicamente. En consecuencia, si se llega al convencimiento de que es necesario publicar un audio para denunciar la ilegalidad, se debe igualmente entregar dicho audio a la autoridad competente para que investigue el delito. El Comercio publicó los audios el martes 7 de octubre, y los días miércoles 8 y jueves 9, que fueron conocidos. No los otros porque una persona moralmente responsable no debe ni puede publicar nada hasta conocerlo a fondo y estar seguro de la veracidad de la información. Por eso rechazo cualquier insinuación de haber encubierto actos de corrupción.
Este es el periodismo responsable y moral. Quien esto escribe se enfrentó con la pluma, en las calles y plazas del país, contra la dictadura fujimorista y la corrupción de aquel gobierno. Mientras ello sucedía, otros periodistas que hoy fungen de moralizadores y campeones de la libertad de expresión estuvieron al servicio de esa nefasta dictadura. ¿Por qué no denunciaron la corrupción en ese gobierno? Hoy se rasgan las vestiduras quienes ayer fueron sumisos al poder. Y esto tiene una explicación. Son aplicados alumnos en la desinformación y están acostumbrados al abuso del poder e intentan controlarlo en beneficio propio. El pueblo no 'chuponea', solo 'chuponean' unos cuantos ricos, poderosos y famosos. Por eso lo denuncio.
Asimismo, con el señor Álvarez Rodrich se dio una confrontación circunstancial sobre el tema, pero esta no fue la causa de su desvinculación laboral.
En nuestra Carta al Lector del 19 de octubre expresamos nuestra posición como diario independiente de los grupos de poder políticos y económicos. Este es un principio fundamental. Por eso rechazamos las insinuaciones que ciertas personas vienen haciendo al llamarnos gobiernistas. Nada más lejano de la verdad. Así como exigimos total transparencia en los actos de las autoridades, consideramos que las informaciones que se publican deben ser plenamente comprobadas. Eso lo saben muy bien nuestros lectores. De igual forma actuamos respecto a las políticas gubernamentales como respecto a la oposición.
Asimismo nos oponemos a la actuación de lobbies que pretenden copar los medios para imponer sus intereses, sean económicos o políticos. Las relaciones entre la prensa y el poder político no están solo referidas al poder que desde el Estado ejerce el gobierno, sino también al poder de los grupos de interés. El Comercio no tiene ningún vínculo con poderes económicos, como algunos han manifestado. El único poder que respetamos es el que proviene del escrutinio diario de nuestros lectores y del pueblo, en los procesos electorales como en el marco de la coyuntura política. Si bien los medios de comunicación cumplen un rol esencial en la democracia, deben igualmente contribuir con su desarrollo y consolidación.
Con respecto a nuestra posición sobre la corrupción y la interceptación telefónica, reiteramos que ambos son delitos. Nos llama la atención la posición de aquellos que los contraponen. ¿Por qué esconder y desinformar sobre la interceptación telefónica? ¿Qué juego tienen entre bambalinas? ¿Qué 'sorpresa' tienen bajo la manga? ¿A quiénes chantajean? En esto tenemos que ser totalmente transparentes. No se puede relativizar al respecto, haciendo creer que solo debe denunciarse al delincuente 'chuponeado' y no al 'chuponeador'. "En el ejercicio de la profesión de periodista, el fin no justifica los medios, la información debe ser obtenida por medios legales y morales", dice la Resolución 103 del Consejo de Europa, respecto a la ética periodística, excelente planteamiento que deberían tenerlo en cuenta algunos periodistas y medios de comunicación.
El derecho de las personas a la vida privada debe ser respetado. El peor enemigo de la democracia no es solo la sumisión al poder, sino el temor de no poder expresarse libremente, porque el ciudadano siente que puede ser interceptado telefónicamente. En consecuencia, si se llega al convencimiento de que es necesario publicar un audio para denunciar la ilegalidad, se debe igualmente entregar dicho audio a la autoridad competente para que investigue el delito. El Comercio publicó los audios el martes 7 de octubre, y los días miércoles 8 y jueves 9, que fueron conocidos. No los otros porque una persona moralmente responsable no debe ni puede publicar nada hasta conocerlo a fondo y estar seguro de la veracidad de la información. Por eso rechazo cualquier insinuación de haber encubierto actos de corrupción.
Este es el periodismo responsable y moral. Quien esto escribe se enfrentó con la pluma, en las calles y plazas del país, contra la dictadura fujimorista y la corrupción de aquel gobierno. Mientras ello sucedía, otros periodistas que hoy fungen de moralizadores y campeones de la libertad de expresión estuvieron al servicio de esa nefasta dictadura. ¿Por qué no denunciaron la corrupción en ese gobierno? Hoy se rasgan las vestiduras quienes ayer fueron sumisos al poder. Y esto tiene una explicación. Son aplicados alumnos en la desinformación y están acostumbrados al abuso del poder e intentan controlarlo en beneficio propio. El pueblo no 'chuponea', solo 'chuponean' unos cuantos ricos, poderosos y famosos. Por eso lo denuncio.
Asimismo, con el señor Álvarez Rodrich se dio una confrontación circunstancial sobre el tema, pero esta no fue la causa de su desvinculación laboral.
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