iexcl;Latinoamérica -mejor dicho "Cretinoamérica"- es tan reconfortante!
Cuando uno experimenta sus aprensiones sobre lo mal
que vota el "electarado" en el Perú, que pone a cualquiera ("violín",
"robaluz", "comepollo", "mataperro") en el Congreso y en las
regiones (el puneño Fuentes es indescri-ptible), o que casi coloca
a un hombre de tan pocas luces como Ollanta en la Presidencia,
debe echar una mirada a algunos vecinos
supuestamente más cultos para exhalar un suspiro de alivio. Se
supone que chilenos, argentinos y uruguayos están mucho
mejor educados y alimentados que los peruanos, además que
generalmente han sido más abiertos a las últimas tendencias
mundiales. Por ende, uno pensaría que votan mucho mejor
que nosotros, un país con tanto semianalfabeto desnutrido.
Pues no, para masaje de nuestra autoestima. Argentina ha tenido
de presidentes recientes a gente tan impresentable como Menem
y estos Kirchner, amén de proseguir con ese culto lunático a rufianes
como los Perón, pareja que impidió que hoy en día sea una
nación equivalente a Australia o Canadá, a pesar de tanta similitud
con ambas naciones en su estructura productiva. Aquí hemos tenido
de todo, pero nada como ese "organized crime" fascistoide y
regresivo, tan nefasto y persistente, como el peronismo, que en
"Cretinoamérica" sólo es empatado por el PRI azteca, favorito para
las próximas elecciones mexicanas, porque allá tampoco aprenden
y les gusta la demagogia corrupta e ineficaz.
Si bien en Chile no se da esto, aún no entiendo cómo un personaje
tan, tan mediocre como Bachelet puede tener esa aprobación
tan alta con un gobierno tan flojito. O que un improvisado
candidato presidencial (Enríquez-Ominami), un aventurero muchachito
alocado y sin equipo, diga barbaridades como que le
avergüenza ser chileno y ahora esté en el segundo lugar; o que
un "hueso" como Frei sea el candidato oficialista y tal vez
pueda volver a La Moneda. Vamos a ver si los chilenos son inteligentes
y eligen a Piñera en diciembre. A nosotros no nos conviene,
porque volverían a una política económica más
reformista y de nuevo Chile crecería a esas tasas mágicas que
alguna vez ostentó.
Y ahora Uruguay acude en nuestro "emotional rescue" (rescate
emocional), como dirían The Rolling Stones. ¿Votaría usted por alguien
que es una mixtura de Waisman con Negreiros, Hugo
Blanco y Polay, por un tipo que ha sido terrorista, que tiene pinta
de cochino y que suelta las mayores sandeces, un "Sancho
Panza" demagogo, simplón y poco cultivado?
Pues tal es este "Pepe" Mujica, el candidato oficialista que es el
favorito. ¿No era Uruguay conocido como "la Suiza de América",
un pequeño país alfabetizado hace años, con la mayor parte de
ciudadanos con secundaria y con una población universitaria importante?
¡Pues véanlo, están por elegir a Mujica! Hegel tenía
mucha razón cuando dijo que cada país tiene el gobernante que
se merece, aunque él lo planteó como un elogio a los Hohenzollern,
pues creía que el Estado Prusiano era la máxima evolución
política del género humano.
A mí Hegel siempre me pareció muy charlatán muy inferior a
Spinoza, Kant, Locke y Hume, pero creo que su máxima tiene
mucho de verdad.
¡Gracias, Uruguay! Nos haces más fácil sobrellevar a los personajes
que tenemos que aguantar aquí diariamente gracias a la sabiduría
de nuestro pueblo, que es capaz de elegir presidenta a
Susan Hoefken o al mono del Parque de las Leyendas.
CORREO
Cuando uno experimenta sus aprensiones sobre lo mal
que vota el "electarado" en el Perú, que pone a cualquiera ("violín",
"robaluz", "comepollo", "mataperro") en el Congreso y en las
regiones (el puneño Fuentes es indescri-ptible), o que casi coloca
a un hombre de tan pocas luces como Ollanta en la Presidencia,
debe echar una mirada a algunos vecinos
supuestamente más cultos para exhalar un suspiro de alivio. Se
supone que chilenos, argentinos y uruguayos están mucho
mejor educados y alimentados que los peruanos, además que
generalmente han sido más abiertos a las últimas tendencias
mundiales. Por ende, uno pensaría que votan mucho mejor
que nosotros, un país con tanto semianalfabeto desnutrido.
Pues no, para masaje de nuestra autoestima. Argentina ha tenido
de presidentes recientes a gente tan impresentable como Menem
y estos Kirchner, amén de proseguir con ese culto lunático a rufianes
como los Perón, pareja que impidió que hoy en día sea una
nación equivalente a Australia o Canadá, a pesar de tanta similitud
con ambas naciones en su estructura productiva. Aquí hemos tenido
de todo, pero nada como ese "organized crime" fascistoide y
regresivo, tan nefasto y persistente, como el peronismo, que en
"Cretinoamérica" sólo es empatado por el PRI azteca, favorito para
las próximas elecciones mexicanas, porque allá tampoco aprenden
y les gusta la demagogia corrupta e ineficaz.
Si bien en Chile no se da esto, aún no entiendo cómo un personaje
tan, tan mediocre como Bachelet puede tener esa aprobación
tan alta con un gobierno tan flojito. O que un improvisado
candidato presidencial (Enríquez-Ominami), un aventurero muchachito
alocado y sin equipo, diga barbaridades como que le
avergüenza ser chileno y ahora esté en el segundo lugar; o que
un "hueso" como Frei sea el candidato oficialista y tal vez
pueda volver a La Moneda. Vamos a ver si los chilenos son inteligentes
y eligen a Piñera en diciembre. A nosotros no nos conviene,
porque volverían a una política económica más
reformista y de nuevo Chile crecería a esas tasas mágicas que
alguna vez ostentó.
Y ahora Uruguay acude en nuestro "emotional rescue" (rescate
emocional), como dirían The Rolling Stones. ¿Votaría usted por alguien
que es una mixtura de Waisman con Negreiros, Hugo
Blanco y Polay, por un tipo que ha sido terrorista, que tiene pinta
de cochino y que suelta las mayores sandeces, un "Sancho
Panza" demagogo, simplón y poco cultivado?
Pues tal es este "Pepe" Mujica, el candidato oficialista que es el
favorito. ¿No era Uruguay conocido como "la Suiza de América",
un pequeño país alfabetizado hace años, con la mayor parte de
ciudadanos con secundaria y con una población universitaria importante?
¡Pues véanlo, están por elegir a Mujica! Hegel tenía
mucha razón cuando dijo que cada país tiene el gobernante que
se merece, aunque él lo planteó como un elogio a los Hohenzollern,
pues creía que el Estado Prusiano era la máxima evolución
política del género humano.
A mí Hegel siempre me pareció muy charlatán muy inferior a
Spinoza, Kant, Locke y Hume, pero creo que su máxima tiene
mucho de verdad.
¡Gracias, Uruguay! Nos haces más fácil sobrellevar a los personajes
que tenemos que aguantar aquí diariamente gracias a la sabiduría
de nuestro pueblo, que es capaz de elegir presidenta a
Susan Hoefken o al mono del Parque de las Leyendas.
CORREO
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