El robo de combustible en la PNP tiene larga data sin que nadie hasta ahora ponga coto al tramado mafioso existente que compra conciencias y voluntades de altos oficiales, subalternos y técnicos. Lamentablemente, esa red delictiva usa las fallas del sistema de control interno, de la Contraloría General de la República o manipula la ausencia de decisiones firmes de las instancias congresales, fiscales o judiciales para permanecer en la impunidad. Los mafiosos saben que hay autoridades blandas que difícilmente continuarán sus investigaciones hasta llegar a fondo, y en ello se basan para seguir traficando con miles de galones de combustible de las unidades motorizadas de la Policía
Pero esta casa periodística en la edición de ayer publicó una seria denuncia en la que nada menos que dos coroneles de la PNP –José Trinidad Muñoz y Julio Maza Quevedo–, ahora pasados al retiro como represalia por sus investigaciones realizadas sobre el robo de combustible, sindican como jefe de la mafia al inspector general de la institución policial, quien estaría a la cabeza del tráfico de gasolina y diésel en grifos proveedores de la PNP.
Lo más grave es que los citados denunciantes también señalan que los dueños de grifos ganadores de las licitaciones no sólo tienen que presentar su mejor propuesta sino que además deben desembolsar "coimas" a ciertas direcciones de la PNP, como Inteligencia, Inspectoría y Logística, con el fin que nadie mueva un solo dedo a la hora de las fiscalizaciones o para acallar a quienes husmeen en sus viles negocios. Según los coroneles (r) Trinidad y Maza, dar dinero a áreas policiales resulta clave para evitar que cualquier investigación trascienda o logre desarticular el status quo existente en las estaciones de servicio “amigas” de la red de corrupción policial, que no cesa en su afán de desfalcar al Estado mediante el robo de combustible por millones de soles.
Ahora, ante la denuncia hecha pública por EXPRESO –basada en la importante información que manejan los oficiales citados que han sido nada menos que inspectores de unidades especializadas de la PNP e investigaron muchas irregularidades en las entrañas del Ministerio del Interior (Mininter)–, instamos a la Comisión de Defensa del Congreso de la República que retome el entusiasmo fiscalizador que mostró el año pasado sobre el tema del combustible distribuido a la PNP, toda vez que el nivel de corrupción que se aprecia en algunas áreas del Mininter nos hacen dudar de la eficiente labor de los actuales órganos de control interno en ese sector. Si el propio inspector general de la PNP ha sido denunciado como supuesto jefe de la red mafiosa de gasolina, entonces ¿quién garantiza que las investigaciones internas serán imparciales? El presidente de dicha comisión congresal, Édgar Núñez, quien en algún momento fue amenazado de muerte cuando descubrió complicidades entre propietarios de grifos y malos oficiales, podría hacer mucho para que este caso sea fiscalizado (judicializado) de inmediato. Asimismo invocamos a la sociedad para que apoye a los miles de policías honestos y decentes –que los hay– a fin de conseguir la expulsión de la delincuencia enquistada en la PNP.
EXPRESO
Pero esta casa periodística en la edición de ayer publicó una seria denuncia en la que nada menos que dos coroneles de la PNP –José Trinidad Muñoz y Julio Maza Quevedo–, ahora pasados al retiro como represalia por sus investigaciones realizadas sobre el robo de combustible, sindican como jefe de la mafia al inspector general de la institución policial, quien estaría a la cabeza del tráfico de gasolina y diésel en grifos proveedores de la PNP.
Lo más grave es que los citados denunciantes también señalan que los dueños de grifos ganadores de las licitaciones no sólo tienen que presentar su mejor propuesta sino que además deben desembolsar "coimas" a ciertas direcciones de la PNP, como Inteligencia, Inspectoría y Logística, con el fin que nadie mueva un solo dedo a la hora de las fiscalizaciones o para acallar a quienes husmeen en sus viles negocios. Según los coroneles (r) Trinidad y Maza, dar dinero a áreas policiales resulta clave para evitar que cualquier investigación trascienda o logre desarticular el status quo existente en las estaciones de servicio “amigas” de la red de corrupción policial, que no cesa en su afán de desfalcar al Estado mediante el robo de combustible por millones de soles.
Ahora, ante la denuncia hecha pública por EXPRESO –basada en la importante información que manejan los oficiales citados que han sido nada menos que inspectores de unidades especializadas de la PNP e investigaron muchas irregularidades en las entrañas del Ministerio del Interior (Mininter)–, instamos a la Comisión de Defensa del Congreso de la República que retome el entusiasmo fiscalizador que mostró el año pasado sobre el tema del combustible distribuido a la PNP, toda vez que el nivel de corrupción que se aprecia en algunas áreas del Mininter nos hacen dudar de la eficiente labor de los actuales órganos de control interno en ese sector. Si el propio inspector general de la PNP ha sido denunciado como supuesto jefe de la red mafiosa de gasolina, entonces ¿quién garantiza que las investigaciones internas serán imparciales? El presidente de dicha comisión congresal, Édgar Núñez, quien en algún momento fue amenazado de muerte cuando descubrió complicidades entre propietarios de grifos y malos oficiales, podría hacer mucho para que este caso sea fiscalizado (judicializado) de inmediato. Asimismo invocamos a la sociedad para que apoye a los miles de policías honestos y decentes –que los hay– a fin de conseguir la expulsión de la delincuencia enquistada en la PNP.
EXPRESO
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