23.3.09

La importancia de recordar

CUANDO INVERTIR EN MEMORIA ES NECESARIO

Por: Ramón Chehade Abogado

Además de la notoria falta de museos en nuestro país, existen muchas otras razones para aceptar la donación ofrecida por el Gobierno Alemán para construir un museo de la memoria como un homenaje a las víctimas de la insania terrorista.

Aceptar este ofrecimiento representa un compromiso con el futuro, porque nuestros hijos deben conocer las atrocidades que su país vivió antes de que nacieran y así comprender la importante necesidad de generar más inclusión y menos indiferencia.

Afirmar que con los dos millones de dólares del Gobierno Alemán se pueden atender muchas otras necesidades más urgentes de nuestra población es una respuesta pobre, demagógica y que solo atiende al gasto inmediato, pero no la inversión futura. No se evalúa siquiera si con el dinero que se recaude por concepto de entradas, el museo de la memoria pueda autofinanciarse y eventualmente destinar sus excedentes a emprendimientos de ayuda a las comunidades víctimas del terrorismo, donde hasta la fecha el Estado tiene poca o nula presencia en la sociedad civil.

Es increíble que nuestras autoridades no alcancen a comprender que el Gobierno Alemán no es responsable de nuestras carencias, ni de la falta de carreteras, escuelas o postas, donde al primer ofrecimiento de ayuda para un fin tan importante como un museo de la memoria que contribuya a que lo vivido no se repita, nuestras autoridades actúen rechazando el ofrecimiento.

Se equivoca nuestro canciller cuando, al sumarse a la posición política que rechaza la construcción del museo de la memoria, afirma que el informe de la CVR “no ha provocado la reconciliación que se esperaba”, tarea que en mi opinión no es responsabilidad del informe ni de la CVR sino de todos los peruanos, quienes debemos tener una conducta más inclusiva en nuestra vida diaria para evitar que tragedias como las vividas se repitan.

Pareciera que la suma de los desaciertos del gobierno nubla de nuevo su visión para mostrar al país y al mundo un verdadero compromiso con el infortunado pasado vivido por los peruanos.

Como ciudadano, no puedo dejar de expresar mis públicas disculpas al Gobierno Alemán por la insensatez e inmadurez en el actuar de nuestras autoridades, no solo a título personal sino a nombre de aquellas personas que creen y defienden la necesidad de construir una mejor nación para nuestros hijos y donde los errores y atrocidades vividas por nuestros compatriotas no deben quedar encarpetados en mudos textos o en silenciosas noticias ya olvidadas, sino que deben constituir el más vivo recuerdo, por más duro que este sea, de la barbarie terrorista sufrida por muchísimos peruanos, especialmente cuando vivimos en un país que no se caracteriza precisamente por su buena memoria ni por aprender de las lecciones dejadas por el pasado.

No hay comentarios: