Hace pocos días comentamos cómo la crisis había llegado a Chile y lo había frenado en seco. Pues bien, ya arribó a Argentina y ahí sí la cosa ha sido mucho peor, dado que el PBI de su último trimestre no sólo se detuvo sino que retrocedió casi 2%, y se pronostica una caída anual de igual magnitud para todo el 2009.
Todo esto agravado por una fuerte sequía que ha golpeado al campo, tradicional motor de las exportaciones gauchas (soya, trigo, maíz y cárnicos). Ya la fea crisis mundial merodea por la zona y es de esperar que el MEF, ProInversión y el BCR reaccionen a tiempo. ¿Por qué no sale aún el Fondo de Garantías Empresariales para reforzar la cadena de pagos? ¿Por qué no se adelantan inversiones como la autopista Lima-Ica o se concesionan Taboada, el puerto de Paita y la autopista Trujillo-Sullana antes de que acabe el verano, pues eso es perfectamente factible? ¿Por qué no se aflojan todos los encajes y se reduce la tasa de referencia? Estamos contra el reloj y me preocupa ver a un MEF concentrado en algo tan poco urgente como emitir bonos... Se acerca el fuego y este bombero está ocupado en pintar el carro en lugar de abrir sus mangueras...
De todas formas, es reconfortante comenzar esta semana con un TLC con EE.UU. en el bolsillo -que hemos conseguido con las justas- con el librecambista Bush ya alejándose de la Casa Blanca y los proteccionistas demócratas arribando. Juraba Obama antes y olvídense de que se iba a ocupar de nosotros, con unos tres meses de parálisis mientras se nombra a la nueva administración pública y con toda la atención en la crisis interna. Este TLC ha sido de suspenso, desde que perdimos la oportunidad de pasarlo con el Congreso estadounidense anteriormente dominado por los republicanos por culpa de nuestros mercantilistas azucareros locales, que frenaron toda la negociación por varios preciosos meses. Lo gracioso es que al final éstos clamaban por el TLC cuando no sólo vieron que su negocio no era amenazado para nada, sino que podían conseguir fabulosas ganancias con el etanol. Como para colgarlos ya saben de donde... Sus pares colombianos, junto a sus polleros, sí lograron impedir que nuestro vecino norteño logre este ansiado pacto al demorar todo por excesivos meses. Ahora espero que la cordura se imponga y que el gobierno pase autos y electrodomésticos a la llamada Canasta 1 para que bajen de precio con fuerza a partir de febrero y la gente sienta inmediatamente el beneficio de este acuerdo.
Finalmente, qué payasos los de la Junta de Regantes al decir que se va a privatizar el agua. No, compadres. Ahora es privada y está en manos de estos regantes, argollas posvelasquistas que manipulan y desperdician la escasa agua con riegos dilapidadores de acequias abiertas y cultivos de arroz, autocobrándose precios ínfimos por ésta y sin rendir cuentas. Ahora más bien llega una reguladora estatal (ANA) y con presencia de todos los actores, hasta las comunidades indígenas, pasándose a manejar racionalmente el tema por cuencas y no por valles. Desde que la Reforma Agraria eliminó la excelente ley de aguas anterior el campo clamaba por este cambio tan urgente, que la verdad pensé que nunca llegaría. Una gran reforma que hizo Ismael Benavides, apartado tontamente del gabinete por las inquinas de Yude Simon y la miopía de Alan.
Aldo Mariátegui
Todo esto agravado por una fuerte sequía que ha golpeado al campo, tradicional motor de las exportaciones gauchas (soya, trigo, maíz y cárnicos). Ya la fea crisis mundial merodea por la zona y es de esperar que el MEF, ProInversión y el BCR reaccionen a tiempo. ¿Por qué no sale aún el Fondo de Garantías Empresariales para reforzar la cadena de pagos? ¿Por qué no se adelantan inversiones como la autopista Lima-Ica o se concesionan Taboada, el puerto de Paita y la autopista Trujillo-Sullana antes de que acabe el verano, pues eso es perfectamente factible? ¿Por qué no se aflojan todos los encajes y se reduce la tasa de referencia? Estamos contra el reloj y me preocupa ver a un MEF concentrado en algo tan poco urgente como emitir bonos... Se acerca el fuego y este bombero está ocupado en pintar el carro en lugar de abrir sus mangueras...
De todas formas, es reconfortante comenzar esta semana con un TLC con EE.UU. en el bolsillo -que hemos conseguido con las justas- con el librecambista Bush ya alejándose de la Casa Blanca y los proteccionistas demócratas arribando. Juraba Obama antes y olvídense de que se iba a ocupar de nosotros, con unos tres meses de parálisis mientras se nombra a la nueva administración pública y con toda la atención en la crisis interna. Este TLC ha sido de suspenso, desde que perdimos la oportunidad de pasarlo con el Congreso estadounidense anteriormente dominado por los republicanos por culpa de nuestros mercantilistas azucareros locales, que frenaron toda la negociación por varios preciosos meses. Lo gracioso es que al final éstos clamaban por el TLC cuando no sólo vieron que su negocio no era amenazado para nada, sino que podían conseguir fabulosas ganancias con el etanol. Como para colgarlos ya saben de donde... Sus pares colombianos, junto a sus polleros, sí lograron impedir que nuestro vecino norteño logre este ansiado pacto al demorar todo por excesivos meses. Ahora espero que la cordura se imponga y que el gobierno pase autos y electrodomésticos a la llamada Canasta 1 para que bajen de precio con fuerza a partir de febrero y la gente sienta inmediatamente el beneficio de este acuerdo.
Finalmente, qué payasos los de la Junta de Regantes al decir que se va a privatizar el agua. No, compadres. Ahora es privada y está en manos de estos regantes, argollas posvelasquistas que manipulan y desperdician la escasa agua con riegos dilapidadores de acequias abiertas y cultivos de arroz, autocobrándose precios ínfimos por ésta y sin rendir cuentas. Ahora más bien llega una reguladora estatal (ANA) y con presencia de todos los actores, hasta las comunidades indígenas, pasándose a manejar racionalmente el tema por cuencas y no por valles. Desde que la Reforma Agraria eliminó la excelente ley de aguas anterior el campo clamaba por este cambio tan urgente, que la verdad pensé que nunca llegaría. Una gran reforma que hizo Ismael Benavides, apartado tontamente del gabinete por las inquinas de Yude Simon y la miopía de Alan.
Aldo Mariátegui
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